Patologías de la piel y enfermedades más comunes
Con la llegada de la primavera y su conocida alergia, la piel también puede sufrir algún que otro problema. Existen diversas patologías de la piel que pueden verse influenciadas por el clima, la cantidad de polen del ambiente o el estado psicológico de cada persona. Hoy hablaremos sobre los problemas de la piel más comunes, sus síntomas y su tratamiento habitual.
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Índice de contenidos
Piel y dermatología
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y está formado por tres capas: epidermis, dermis e hipodermis. Su función es la de actuar como una barrera protectora para el organismo, y le defiende de virus y bacterias, entre otros. La disciplina de la medicina que se encarga de estudiar, prevenir y tratar las patologías de la piel es la dermatología. Sin embargo, los profesionales de otros campos de la salud también deben tener conocimientos en este ámbito para poder ser lo mejor posibles en su trabajo.
Los trastornos de la piel varían en cuanto a síntomas y gravedad; pueden ser crónicos o temporales, indoloros o causar algún tipo de dolor o molestia. Además, algunos son circunstanciales, mientras que otros pueden ser genéticos. Hay enfermedades de la piel que son consecuencia de infecciones víricas u hongos; mientras que en otras intervienen factores genéticos, ambientales o a causa de problemas inmunológicos.
Patologías de la piel: síntomas y tratamiento
Acné
El acné es una de las patologías de la piel más comunes, y afecta aproximadamente al 80% de la población, en personas de 11 a 30 años. Habitualmente, aparece en la preadolescencia y perdura hasta la adultez, en la mayoría de los casos. Su pico se suele situar entre los 14 y los 19 años.
Es una enfermedad de la piel que causa la aparición de puntos negros, espinillas, quistes y nódulos que pueden llegar a ser muy profundos y dolorosos. Lo más habitual es que aparezca en el rostro, aunque también puede afectar a los brazos, la espalda y el torso. Los granos pueden llegar a infectarse si no se limpian adecuadamente.
Esta patología se produce a causa de que las células muertas de la piel, bacterias o sebo seco que se acumula en la piel obstruyen los folículos pilosos, bloqueando el sebo que debería salir por los poros.
Tratamiento
Esta enfermedad tiene diversos grados de gravedad, por lo que el tratamiento puede variar. Sin embargo, para prevenir su aparición y mejorar su aspecto, es muy importante mantener la piel bien limpia, sobretodo después de maquillarse. Una rutina de limpieza facial en profundidad e hidratación es lo ideal, además de complementarlo con un exfoliante un par de veces a la semana y un cosmético específico para el acné, siempre y cuando sea necesario.
Vitiligo
El vitiligo se caracteriza por la aparición de manchas blancas de diversos tamaños y en distintas partes del cuerpo. Se suele encontrar en las zonas más expuestas al sol, como los brazos, la cara, los pies y las manos. No es una enfermedad contagiosa y, en principio, tampoco es grave. Sin embargo, puede provocar quemaduras solares y, en algunos casos, cáncer de piel, entre otros. Los expertos creen que las causas podrían ser una combinación entre componentes genéticos y ambientales. Por el momento, únicamente se pueden realizar tratamientos para equilibrar el tono de la piel.
Cáncer de piel
Como cualquier otro tipo de cáncer, el cáncer de piel surge cuando las células anomalas de la piel, cuyo ADN ha sido dañado, crecen de forma descontrolada. Esta enfermedad es provocada, principalmente, por la radiación ultravioleta, razón por la cual es tan importante ponerse protector solar si vamos a estar expuestos al sol.
Síntomas
- Manchas grandes de tono marrón con motas pequeñas
- Lunares que cambian de color o tamaño
- Lunares con sangrado
- Lesiones con borde irregular y partes en color rojo, blanco o azulado; y acompañadas de ardor o picor.
- Lesiones oscuras en las palmas de las manos, las plantas de los pies, las mucosas de la boca, la nariz o los genitales.
Tratamiento
Será un médico profesional quien decida qué tratamiento llevar a cabo para cada caso, puesto que cada paciente debe ser tratado de forma individual.
El principal tratamiento de este tipo de cáncer es la cirugía, empleada para retirar el crecimiento de las manchas, lunares o pequeños tumores. Para ralentizar el avance de la enfermedad los tratamientos más habituales son la quimioterapia, la radioterapia o la inmunoterapia.
Pie de atleta
El pie de atleta es una de las patologías de la piel más contagiosas, ya que se puede propagar por otras partes del cuerpo o a otras personas si tienen contacto con la zona infectada, ya sea de forma directa o indirecta. Es una infección causada por un hongo y provoca erupciones acompañadas de picor, ardor y, en ocasiones, descamación.
Tratamiento
El pie de atleta se trata con cremas específicas, conocidas como antimicóticas, cuya finalidad es destruir el hongo que causa la infección. El crecimiento de este hongo se ve favorecido por entornos húmedos y cálidos. Para prevenir el pie de atleta, podemos poner en práctica algunos consejos:
- No utilizar calcetines y zapatos húmedos o muy ajustados.
- No compartir calzado, ropa de cama, toallas o esterillas con alguien que tenga la infección.
- Evitar andar descalzo en sitios públicos favorables para el crecimiento del hongo: gimnasios, piscinas, duchas comunes, vestuarios y saunas, entre otros.
Verrugas
Las verrugas son pequeñas prominencias epidérmicas benignas que pueden aparecer en cualquier zona del cuerpo. Normalmente son asintomáticas, aunque pueden llegar a causar un dolor leve. Pueden desaparecer por sí solas, aunque también se pueden eliminar con unos tratamientos sencillos.
Las verrugas se tratan con fármacos con ácido salicílico o crioterapia, que consiste en la aplicación de nitrógeno líquido a la verruga.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que provoca la aparición de escamas y manchas rojizas, que causan dolor y picor. En la aparición de la psoriasis intervienen factores genéticos y ambientales. Además, se ha demostrado que cuando el sistema inmunitario está debilitado o se sufre de estrés, obesidad o tabaquismo, hay mayor probabilidad de padecerla.
Se manifiesta en forma de brotes, que pueden durar semanas y meses, disminuir y volver a aparecer al cabo de un tiempo. Los síntomas más comunes son:
- Manchas rojas cubiertas con escamas.
- Piel seca y agrietada que puede llegar a sangrar.
- Picor, ardor y dolor.
- Uñas agrietadas.
- Inflamación de las articulaciones.
Tratamiento
Existen diversos tipos de tratamiento para la psoriasis, cuyo objetivo es controlar los síntomas.
- Tópicos. Cremas con corticosteroides que se aplican en casos leves de psoriasis.
- Fototerapia. Radiación con luz ultravioleta, natural o artificial.
- Medicamentos sistémicos, por ejemplo retinoides.