Tipos de dietas para perder, ganar o mantener el peso

Ya sea para ganar, perder o mantener nuestro peso, existen diversos tipos de dietas que debemos conocer. Es importante que sea un especialista en nutrición quien nos asesore en el momento adecuado, ya que este sabrá cuáles son nuestras necesidades nutricionales y, por lo tanto, podrá elaborar una dieta adaptada a cada paciente. Hoy te vamos a explicar qué dietas son las más comunes y en qué se diferencian unas de otras.

Si quieres aprender más sobre alimentación y aprender a elaborar planes dietéticos, consulta el Máster en Nutrición y Dietética y pide información sin compromiso alguno.

Empezar una dieta

Cuando queremos cambiar nuestros hábitos hacia unos más saludables, muchas personas se plantean hacer dieta. Ante esta idea, nos encontramos con diversos tipos de dietas, orientados a diversos objetivos. Los más comunes suelen ser la pérdida de peso y grasa corporal, o el aumento de la musculatura.

Podemos definir una dieta como un conjunto de hábitos en torno a la alimentación diaria. Estas dependen de la actividad física que realice la persona, de sus necesidades nutricionales o de su tipo de alimentación: omnívora, vegana o vegetariana, entre otras.

Tipos de dietas más comunes

Para empezar, distinguimos dos grandes grupos, cuya finalidad es más general. Dentro de este tipo de dietas, distinguimos algunas más específicas.

– Dieta hipocalórica

La dieta hipocalórica es un tipo de dieta que restringe la ingesta calórica en el día a día. El número de calorías se reduce de forma progresiva, y aporta al cuerpo la energía necesaria para realizar las tareas cotidianas. Este tipo de dieta está indicado para aquellas personas que quieran perder peso o tengan sobrepeso y obesidad. Las calorías ingeridas tienen que ser menos de las que gastamos, es decir, tiene que haber un déficit calórico. Este tipo de dieta, si se realiza de forma correcta y progresiva, proporciona resultados visibles de forma rápida y no tiene por qué provocar un efecto rebote.

– Dieta hipercalórica

La dieta hipercalórica, por lo contrario, es un tipo de dieta que aporta una carga energética mayor de la que el cuerpo se necesita. Está indicada para aquellas personas que quieran aumentar tanto su peso como su masa muscular, así como a deportistas y personas que practiquen mucha actividad física a lo largo del día. Esto no significa que se puedan comer todo tipo de alimentos ricos en azúcares refinados y grasas saturadas; sino que se consumirán alimentos saludables y se aumentará la cantidad ingerida de estos.

Tipos de dietas específicas

En esta categoría encontramos diversos tipos de dietas que comparten una característica común: están orientadas a un objetivo muy concreto y se basan en consumir en mayor cantidad un grupo de alimentos específicos.

– Dieta proteica

La dieta proteica está basada en la ingesta de alimentos con mayor contenido en proteínas, como la carne, el pescado, los lácteos y las legumbres. Este tipo de dieta la suelen hacer deportistas o personas que quieren perder peso sin tener mucho conocimiento de nutrición. Puede llegar a excluir alimentos fundamentales como las frutas y las verduras, y puede ocasionar problemas de salud en determinados casos. Es una dieta restrictiva que, a la larga, puede causar efecto rebote.

– Dieta detox

La palabra “detox” ha ganado popularidad en los últimos años, y está en boca de todo tipo de personas que apuestan por hábitos de vida y alimentación saludables. Este tipo de dieta se ideó como proceso para depurar el organismo tras un período de comidas copiosas, por ejemplo. Se basa en el consumo exclusivo de líquidos durante, al menos, un día completo a la semana. Este tipo de dieta puede llegar a ser peligrosa para personas que tengan un trastorno de alimentación, por lo que no se recomienda hacerla sin supervisión de un especialista en nutrición.

– Dieta alcalina

A este tipo de dieta se la conoce también como dieta del pH, y ha sido promocionada alegando a sus propiedades “anticáncer”. La dieta alcalina promete la depuración del organismo, y también defiende que protege contra tumores. En este tipo de dieta se apuesta por cereales integrales, legumbres, frutas y verduras, pero restringe alimentos que son saludables y necesarios para el cuerpo humano.

No a las dietas milagrosas

Si una dieta te promete una rápida pérdida de peso o un aumento desmesurado del volumen de la musculatura sin consecuencias, no confíes. Las dietas milagrosas son tipos de dietas que prometen alcanzar objetivos en muy poco tiempo y sin apenas esfuerzo. Son dietas que, a menudo, se basan en el consumo de alimentos preparados, complementos alimenticios y similares, comercializados por marcas de todo tipo.

Las dietas milagrosas pueden llegar a ser muy perjudiciales para la salud, y pueden llegar a causar problemas relacionados con la falta de nutrientes necesarios y trastornos alimenticios, entre otros. Por ejemplo, una dieta excesivamente alta en proteínas puede llegar a tener consecuencias para el hígado.

Como hemos mencionado varias veces, hay que consultar a un especialista en dietética y nutrición para que sea este quien nos asesore en nuestra alimentación diaria.